lunes, 13 de octubre de 2008

Un cuerpo

Mi cuerpo no soy yo,
no lo es esta mano
que no tiembla.

Mienten los ojos...
de toda falsedad
se viste mi piel.

Estrujo una lágrima
hecha de polvo y piedras

Sangre que no brota
de una herida invisible.

Pero la tarde
es tarde, todavía,
penetra por mis poros
inunda de músicas
el alma que aún vive.

No es mío mi cuerpo
mano,
vacío,
hueco.

Todo miente,
la oscuridad también es falsa.